Por qué...? y para qué..? Para que ser princesa si no tengo un castillo donde soltar mis pelusas?

Encadenada a otro futuro que yo misma he creado sin saber muy bien el patrón que debía utilizar. No quiero vivir de nuevo resignada, no lo merezco, o si...? La decepción y la pena envuelta en rabia se hizo conmigo, convirtiéndome en lo que soy ahora, lo que nunca quise ser y conseguí no serlo. Ahora esa ha vuelto y no sé como librarme de ella. La desprecio y sin embargo la siento tal cual era antes. Esa frustración que me acoge como si fuera lo único y exclusivo de toda esta pueril vida. No la quiero; quiero mis ilusiones, no quiero nubes negras.
Ahora se lo que realmente quiero después de tantos errores. Podrá parecer un color rosa pero sé lo que hago, ahora si. Quiero cumplir todo eso porque los sueños se cumplen siempre que quieras que se cumplan. Hay que tener paciencia, bendita paciencia! También sosiego y prudencia.
No necesito envidiar a nadie porque yo puedo conseguirlo todo. Pero, cuando podre volar así de alto? Solo el tiempo lo sabe, solo el tiempo lo borra todo, solo el tiempo me dirá que camino tomar. Mientras tanto paso los días como me lo permite mi otro yo, el demonio que se ha instalado entre esta lucha de mundos enfrentados por un solo amanecer. El amanecer que yo quiero, el que sueño, el que anhelo sin ni siquiera rozarlo, el que quiero junto a ti...
Amaneceres sin nubes negras...